26 May COMO GERENCIAR UNA PEQUEÑA EMPRESA
Muchas personas logran concretar una idea de negocio. Pero en su afán de convertirse en empresarios o dueños, no saben cómo administrar una pequeña empresa. En este artículo te damos algunas pautas que debes tener en cuenta al momento de gerenciar tu empresa.
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- Administra bien tú tiempo.
Simplifica para no asumir más trabajo del necesario, tener claro que no todo lo puedes hacer tu solo. La buena administración de tu negocio, depende de la capacidad que tengas para liderar y dirigir. Para ello parte de tus funciones, es saber delegar tareas operativas. Por ejemplo, si vas a gestionar tú mismo las facturas utiliza un programa de facturación. No puedes estar en todo, ni encargarte de todos los procesos a la vez, sobre todo si tienes personal contratado, enséñales, capacítalos, esto permitirá establecer una relación de confianza y fidelidad. Recuerda que la automatización de procesos es muy importante y por último acostúmbrate, a llevar una agenda diaria de tareas. - Delega tareas en otros profesionales.
Aunque no puedas mantener a más trabajadores, eso no significa que tengas que asumir tú todas las tareas. Hay trabajos que se pueden encargar a otras empresas. Por ejemplo, puedes dejar la contabilidad en manos de un asesor contable, contratar a un diseñador web para hacerte tu página, un community manager, etc. terceriza algunas tareas en beneficio tuyo. - Se muy organizado.
Planifica cada día lo que vas a hacer y evita las distracciones. Debes asumir las tareas que te corresponden, pero hacerlas siguiendo una planificación y un programa orientado a conseguir buenos resultados. Eso implica una disciplina de trabajo para poder ejecutar de forma eficaz las tareas que vayas a asumir. Además, ten en cuenta que tú serás el único y principal estratega de tu negocio y para eso necesitas tiempo de pensar. - No dejes de lado la formación.
Alguien que emprende un negocio debe estar al día en conocimientos. Hay muchas tareas que vas a tener que hacerlas tú porque no puedes asumir el costo de delegarlas. Puedes hacerlas, pero tendrás que aprender. No tengas miedo a documentarte y aprender. Existen montones de blogs, vídeo-tutoriales y páginas en las que te enseñan tareas que cualquiera con un mínimo de conocimientos básicos puede desarrollar. - Las ventas son el motor de tu negocio.
Muchos asumen muchas tareas rutinarias que no generan ingresos. Todo es importante pero la mayor parte de tu tiempo debes destinarlo a aspectos que te generen ingresos y las ventas deben ser la prioridad. Lleva un control diario de tus ventas y para ello es importante que manejes bien una hoja de cálculo. Elabora una buena tabla de datos, e incluso adiciona algunas operaciones matemáticas, que te permitirán contabilizar totales y subtotales, dependiendo de la información que necesites. Lo importante de toda esta aplicación, es que puedas saber con exactitud, el total de ventas diarias, por producto vendido al final de cada día y al final del mes identificar igualmente, el total de ventas por producto. - Busca nuevas formas de incrementar tus ventas.
Puede ser con descuentos, promociones. Si tu producto es poco costoso y de fácil distribución, ofrece servicio delivery. Es una excelente y muy atractiva opción, disponer de un servicio de entrega a domicilio, las personas son atraídas fácilmente por este tipo de servicio. - Atención Post venta.
Crea tu propia base de clientes. Utiliza las redes sociales. Genera ideas de publicidad, promociones, incentívalos a que te sigan por: Facebook, Twitter, Instagram, etc. Recuérdales sus fechas de cumpleaños, sobre todo con aquellos clientes que consideras recurrentes en tu negocio. - Lleva un control de tu inventario.
Para hacerlo, lo primero que tienes que hacer, es elaborar un inventario inicial. Para ello se recomienda que te apoyes de la hoja de cálculo Excel, donde organizarás el inventario por producto. Es recomendable que por cada producto o servicio que tu empresa ofrezca, lleves un control individual, en el cual actualizarás las entradas y las salidas del mismo. Esto de manera que la información se tenga bajo control y supervisión, a la hora de necesitar información, del estado de tu inventario. - Controla los costos de tu negocio.
Recuerda que tienes costos fijos y costos variables, debes saber identificarlos para poder controlarlos. En este punto, es importante definir cuáles son los costos fijos, costos variables y los indirectos, ya que de esto dependerá, el costo final del producto que estas ofreciendo al usuario final. Deberás registrar todos los costos fijos, referentes a la elaboración del producto. Es decir, la materia prima con que se elaborará, en el caso de que sea manufacturado por otra empresa, el costo del mismo y la mano de obra o salario de los empleados.Dentro del costo variable, debes tomar en cuenta la maquinaria y la tecnología que usarás, en la elaboración del producto. Deberás tener en cuenta, los costos de mantenimiento de dicha maquinaria, para que su vida operativa y útil sea la más óptima posible. En referencia a los costos indirectos, te puedo decir, que son todos aquellos, que permiten establecer o tener un cálculo preciso. Por ejemplo: la energía eléctrica, el trasporte de distribución, los gastos de publicidad, entre otros. En este punto es importante que te apoyes en una hoja de cálculo. - Infórmate de los temas legales.
Otro problema con el que se encuentran muchos pequeños empresarios y emprendedores, como es lógico, es que desconocen los aspectos legales.
¿Qué obligaciones tengo si creo una S.A.C.? ¿Cuándo tengo que hacer la liquidación del IGV? ¿Cómo hacer mi declaración anual? ¿Cuándo y cómo pagar el Impuesto a la renta? Son preguntas que te podrá resolver un asesor fiscal, la propia SUNAT o que podrás encontrar en Internet, investigando un poco, aunque con cuidado, ya que las normas cambian y no toda la información sobre temas legales que encuentres estará actualizada.
- Administra bien tú tiempo.
En definitiva, gestionar una pequeña empresa cuando lo haces en solitario requiere prestar atención a una serie de puntos esenciales. Muchas de estas cosas podrías simplemente delegarlas si tuvieras más empleados, pero como no es así, trata de priorizar, simplificar e informarte para conseguir que tu negocio siga creciendo y salga adelante.